Los relevos

Incluido en ‘Mucha Gente Pequeña’. Gustavo Duch

Guisan sobre un fuego vivo arroz y frijolitos, y guardan raciones en bolsas de plástico. Nada más, y cada día lo mismo. La bebida será agua de la fuente embotellada en práctico ejercicio de reutilización. Son catorce mujeres y les llaman ‘las patronas’.

Las invitadas e invitados no pueden escoger el menú, no les importa. No se visten para la ocasión, no comen con cubiertos y tampoco se lavan las manos. Es el fast food más rápido nunca visto. Cada día llegan a donde las patronas a unos 40 km/hora. Tal como reciben su comida se marchan, sin pagar ni parar, ni tan siquiera para tomarse un cafecito tranquilamente.

No hay tiempo, no hay pausas, no hay comodidades, ni techo ni abrigo sobre un tren de mercancías que –como moscas- transporta a muchas personas que desde Centroamérica intentan llegar a Estados Unidos cruzando de Sur a Norte todo México; más de 8 mil kilómetros. En algunos puntos del viaje es habitual que allí arriba sufran amputaciones y electrocutaciones.

logopatronaY siempre pasan hambre… hasta Guadalupe, municipio de Amatlán de los Reyes, Veracruz, México, cuando sin que el tren baje la marcha, ven a catorce mujeres con bolsas y botellas en sus brazos alzados, gritando aullidos maya, junto a la vía muy imprudentemente.

Sin entrenamientos previos por parte del donador y del tomador, sin posibilidades de repetir, no hay fallo en la entrega del testigo. Ninguna bolsa queda huérfana, todas las botellas encuentran una mano.                                                                                                                                           

(*) Gracias a Nieves Prieto Tassier y Fernando López Castillo por documentarlo en ‘El tren de las moscas’

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